La transacción será ejecutada por Gruyere Holdings, una filial de propiedad absoluta de Gold Fields, y se estructurará mediante un esquema de acuerdo. Esta modalidad permite a Gold Fields adquirir todo el capital social emitido y en circulación de Gold Road a través de un proceso regulado y sujeto a la aprobación de accionistas y tribunales.

La oferta presentada contempla una contraprestación total en efectivo de A$3,40 por acción, desglosada en un componente fijo de A$2,52 y uno variable de A$0,88 vinculado al valor de la participación de Gold Road en Northern Star Resources. Este último se calcula con base en el precio promedio ponderado por volumen (VWAP) de los cinco días previos a la entrada en vigor del acuerdo, siendo la cifra al 2 de mayo de 2025.

Esta oferta representa una prima del 12 % sobre la propuesta inicial y ha sido calificada como “atractiva” por el directorio de Gold Road, que recomienda unánimemente a los accionistas votar a favor del acuerdo en la próxima junta.

“El Consejo se ha centrado en todo momento en garantizar que aportamos valor y actuamos en el mejor interés de nuestros accionistas. Creemos que esta transacción proporciona una salida atractiva y segura, con valor inmediato”, señaló Tim Netscher, presidente de Gold Road.

Como parte del acuerdo, Gold Road también planea distribuir un dividendo especial completamente franqueado de A$0,35 por acción, equivalente a aproximadamente A$379 millones en total, aprovechando los créditos fiscales disponibles.

La adquisición de Gold Road no solo le otorga a Gold Fields el control total de la mina Gruyere, sino que también le permite consolidar su huella en una de las jurisdicciones mineras más estables y atractivas del mundo. Gruyere, descubierta en 2013 y en operación desde 2019, ha demostrado ser una fuente confiable de producción aurífera a gran escala, con costos competitivos y una vida útil considerable.

Esta operación se suma a otros movimientos recientes de la minera sudafricana, como la renovación de su acuerdo con el gobierno de Ghana para continuar las operaciones en la mina Damang, subrayando su intención de mantener una presencia diversificada y de largo plazo en los principales distritos mineros del planeta.

Si todo avanza según lo previsto, la transacción se finalizará en octubre de 2025, marcando un nuevo capítulo en la historia de ambas compañías.